lunes, 16 de noviembre de 2009

Reflexionar

Al despertarse se puso en pie, miro para su alrededor y todo seguía ahí, el bosque oscuro seguía tan oscuro como cuando se había quedado dormido en medio de la tormenta, nada mas que ya no llovía. El conejo aun dormía panza para arriba. Al rato despertó.
Ese día caminaron todo el día en silencio, quizás porque el hombre pensaba que el escuchar al conejo hablar había sido parte del cansancio, hasta que el silencio termino. -¿Pensó mi rey?- Pregunto el conejo tímidamente.- ¿Mi rey? ¿Como sabes que yo fui rey?- El hombre entro en desesperación por lo que estaba pasando.- Reflexiona mi rey es hora de reflexionar, acuérdate de todo, lindos días pasaste en el castillo, es hora de reflexionar y pensar,¿ estas dolido?- El hombre no podía entender que es lo que pasaba, quien era este conejo – Bueno, veo que eres un conejo que habla, en un bosque oscuro, me pides que reflexione, yo emprendí mi viaje en busca de algo… espero encontrarlo…- Contesto angustiado el hombre. Y el conejo se echo a correr dejando atrás al hombre acurrucado en el piso junto a un árbol quieto y pensante. Dolor, angustia, pena, tristeza y un sollozo constante era lo que se podía sentir en el ambiente, y el hombre siguió así durante varios días y al conejo no se lo vio por ningún lado