miércoles, 25 de noviembre de 2009

Desde el otro lado


Se encontraba entre un montón de animales, pero no eran ellos el motivo por el cual estaba ahí. De repente vio que el hombre se había parado, luego de hablar con el ratón, y empezaba a caminar entre ellos, pasó varias veces por su lado. Una vez mas paso a su lado y del miedo que le genero que vuelva a pasar y seguir de largo, su impulso le gano y pincho con su cola la pierna del caballero. Este cayó al piso y empezó a gritar. El escorpión entro en una nube de miedo y desesperación. El hombre gritaba de dolor y se agarraba el corazón, el escorpión al ver esto intento quitarle el corazón para sacarle el dolor, sin darse cuenta que era lo peor. El hombre saco la mano de este y se puso en pie. Grito basta y el escorpión se vio superado por todo esto. Vio que el hombre se quitaba la camisa y se llevaba la mano al pecho, arrancaba su corazón y se lo entregaba. Por la cabeza del escorpión pasaban muchas cosas, sobre todo miedo. Pensó un rato al ver esto y al escuchar al hombre y pensó que lo mejor era darse media vuelta, mostrar desinterés, sin ser así la realidad e irse. Lo que no sabia era que ese paso atrás era el ultimo entre ellos. Dejar el corazón tirado y demostrar desinterés fue el final. El hombre permaneció varios días tirado en el claro mientras los animales miraban como latía lentamente el corazón sin mostrar mejorías, pero el escorpión nunca mas volvió.

martes, 24 de noviembre de 2009

Que mas?



Al instante la mirada se le nublo y perdió el sentido de la audición. El dolor fue cada vez mas fuerte e inaguantable, gritaba de dolor y tirado en el piso se movía para todos lados, intentando escapar de algo a lo que nadie le puede escapar. – Los dolores provocados cuando un corazón se rompe no son fáciles de sanar y no hay forma de curar.- Escucho en su mente la voz del anciano. De repente sintió que una mano intentaba arrancarle el corazón, pero el caballero se resistía, era ese poder que le había sido concebido al ser rey que lo impulsaba a negarse dejarse perder la batalla. El hombre se puso de pie tambaleante, hizo un movimiento, como sacando aquella mano que intentaba arrancarle el corazón y gritó para sus adentros…. BASTA!! y cayó de rodillas ante el escorpión. No había otro ser que el y el escorpión, estaban solos. El escorpión ya había dado su toque doloroso y punzante, ese que hacia que el hombre sintiera que el corazón se le desprendía del cuerpo y del alma. En ese instante el hombre le hablo directamente al escorpión.- Llegaste muy lejos toma mi corazón si es lo que pretendes, no hacia falta hacer esto para demostrarlo, te arrepentiste muchas veces y hoy el que dice basta soy yo…- El hombre se paro nuevamente y se quito la camisa, se llevo su mano derecha hacia su pecho y nadie sabe como la introdujo sacando un órgano de dentro, era el corazón que apenas latía y estaba achicharrado por tanto dolor. – Toma, es tuyo, nunca dejo de serlo- Y esas fueron las últimas palabras antes de caer de boca al piso y desvanaserse por completo. El escorpión miro largo rato el corazón, que yacía tirado en el piso,  se dio media vuelta intententando fingir que no le importaba y se alejo nuevamente, como tiempo atrás había echo. Y la voz del conejo volvió a flotar en el aire. – ¿Para que volviste? Reclamas su corazón y cuando lo tienes, lo dejas tirado demostrando desinterés-

lunes, 23 de noviembre de 2009

Ataque directo

Llegaron a un claro donde el anciano se sentó juntos en el medio, hizo una señal y el hombre se sentó frente a el. – Te pido que cierres los ojos y pienses un poco en tu vida, en eso que estas buscando ahora y mas que nada en lo que te esta atormentando- dijo el viejo mientras se quitaba el sombrero y dejaba al descubierto su largo pelo.
El hombre paso largo rato con los ojos cerrados, empezó a escuchar ruidos y hasta que el anciano no le dijo, no abrió los ojos. –Ya puedes abrir los ojos, creo que tienes mucho para mirar y pensar-. Al abrir los ojos el hombre se encontró rodeado de animales de toda clase y tamaño. –Estos son tus pensamientos y sentimientos recientes mi querido amigo-. Los animales estaban todos sentados mirando hacia el centro del claro. De repente se empezaron a abrir, dejando pasar a un ratoncito. –Hola – Se presento el ratoncito e hizo una reverencia.- Lamentablemente no por ser el mas chico soy el menos importante- Dijo el ratón y se sentó juntos a los dos hombres. Hablaron largo rato y el hombre comprendió que representaba ese ratón. Era aquella vez que, cuando chico, se había perdido en el bosque y que hasta el día de hoy lo seguía atormentando. El hombre se levantó, miro para todos lados, camino un rato durante todo aquel tumulto de animales, cuando de repente un fuerte pinchazo, en su pierna, lo hizo caer. Era un escorpión que lo había picado, el hombre se alerto y tubo miedo, creía que iba a morir por un fuerte dolor, pero… el dolor no era en la pierna, era directamente… en el corazón!

viernes, 20 de noviembre de 2009

El Guia


Abrió los ojos y una mirada de desesperación surgió de sus ojos espiralados. Se había quedado dormido y al levantar la mirada encontró a un viejo sentado frente a él. - ¿Cómo estas?- Pregunto el viejo con una voz familiar. –Bien, pero ¿Dónde esta el conejo que estaba conmigo? En mi sueño dijo que si yo moría el moría..- La voz del hombre se vio interrumpida por la del viejo - ¿Estas vivo? Entonces no hay de que preocuparse hombre.-
Pasaron varios minutos en silencio. El viejo se levanto y empezó a caminar, dio unos pasos y se dio vuelta.- Si sigues ahí sentado el tiempo pasara y la vida terminara, las cosas no se hacen quedándose sentado- Al escuchar esto el hombre se levantó de un salto y emprendió la caminata junto con el anciano. - ¿Quién eres? – Consulto el hombre al viejo. - ¿Importa eso ahora?¿ no has perdido todo?¿Que puedes perder donde yo te llevo?- Contesto el viejo con una voz que surgía desde su interior como si no moviera la boca y el sonido surgiera de otro lado de este.-No se donde estamos yendo, ¿eso contesta a sus preguntas?- Se frenó el hombre y espero una respuesta.- Sigue caminando, lo que buscas quizás lo encuentres donde vamos…- El viejo siguió caminando a lo que el hombre, sin tener un rumbo, siguió su marcha.

martes, 17 de noviembre de 2009

Es hora.

De repente sintió una brisa, al momento sintió una sensación horrible, abrió los ojos y estaba cayendo, cayendo por un túnel, sin nadie, solo, sin nadie que caiga junto a él, algún alado para ayudarlo. Caía y no sabia hasta cuando ni hasta donde. Caía y caía, en un momento impacto contra una pared cristalina, agua, y siguió cayendo en el agua a la misma velocidad, había un problema mas ahora, caía y sin saber hasta donde pero si sabia hasta donde le duraba la respiración y cada vez tenia menos aire. De momento, se freno, un fondo pantanoso fue quien lo recibió en esa caída y por la fuerza de la caída sus piernas habían quedado atrapadas en el fango, estaba en problemas, estaba cansado, los días angustiado le habían quitado el apetito y no tenia fuerzas. Tenia dos opciones, dejarse morir o juntar fuerzas del fondo de si mismo y luchar por salvarse… escuchó una voz, le costo reconocerla pero al final lo logro, era el conejo, justo cuando se estaba dejando morir, escucho esa voz suave y clara,- si no luchas morirás y yo contigo, si mi amigo, no soy mas que tu mente, tus sentimientos y muchas cosas mas, aquel día que te deje pensando no te deje pensando te deje con tus sentimientos con vos mismo, acá esta el fruto de eso…- la voz del conejo se perdió en la mente inconciente del hombre

lunes, 16 de noviembre de 2009

Reflexionar

Al despertarse se puso en pie, miro para su alrededor y todo seguía ahí, el bosque oscuro seguía tan oscuro como cuando se había quedado dormido en medio de la tormenta, nada mas que ya no llovía. El conejo aun dormía panza para arriba. Al rato despertó.
Ese día caminaron todo el día en silencio, quizás porque el hombre pensaba que el escuchar al conejo hablar había sido parte del cansancio, hasta que el silencio termino. -¿Pensó mi rey?- Pregunto el conejo tímidamente.- ¿Mi rey? ¿Como sabes que yo fui rey?- El hombre entro en desesperación por lo que estaba pasando.- Reflexiona mi rey es hora de reflexionar, acuérdate de todo, lindos días pasaste en el castillo, es hora de reflexionar y pensar,¿ estas dolido?- El hombre no podía entender que es lo que pasaba, quien era este conejo – Bueno, veo que eres un conejo que habla, en un bosque oscuro, me pides que reflexione, yo emprendí mi viaje en busca de algo… espero encontrarlo…- Contesto angustiado el hombre. Y el conejo se echo a correr dejando atrás al hombre acurrucado en el piso junto a un árbol quieto y pensante. Dolor, angustia, pena, tristeza y un sollozo constante era lo que se podía sentir en el ambiente, y el hombre siguió así durante varios días y al conejo no se lo vio por ningún lado

El comienzo de un largo viaje

Había amanecido cuando un conejo lo despertó respirándole al oído. Abrió los ojos, miro al cielo y estaba oscuro por las nubes de una futura tormenta. El conejo se lo quedo mirando y estornudo, el hombre se echo a reír. – Parece que va a llover amiguito- Le dijo el hombre a la pequeña criatura. – Tendré que buscar un refugio- Y el hombre empezo a caminar en busca de su objetivo.
Caminaron varias horas hasta encontrar una cueva, ya para ese entonces la tormenta había comenzado y se encontraban empapados. Una vez armada la fogata y un poco mas reconfortados del frio, el hombre miró al conejo y le dijo. – Ahora que recuerdo, ¿desde cuando estas conmigo? – Para el asombro del hombre el conejo se sentó en una ramita y hablo. – No lo recuerdas pero desde que saliste aquel día del castillo, recién hoy me acerque, me habrás visto varias veces, pero ¿quien no ve un conejo en medio del bosque?. El hombre asombrado se quedo sin habla y se quedo pensativo. – Es el momento de hacer eso mi amigo, sentarse a pensar , sentarse y pensar – Dijo el conejo y se tiro a dormir.

domingo, 15 de noviembre de 2009

No hay reino sin reina.

Un día el rey se despertó por un estruendo, era la puerta del cuarto que había sido cerrada. Ni un adiós, ni un chau, ni un simple hasta luego, aunque quizás no allá luego. El rey se levantó atolondradamente y se calló en ese intento por salir corriendo tras la reina, quien se iría para no volver mas. El rey la busco por cielo y tierra, mando a llamar a los mejores marinos para buscarla por los océanos, pero no, ella no se había ido de cuerpo, sino de alma. No estaba lejos, pero la sentía lejos. Ella había tomado una decisión y si no quería ser encontrada no lo iba a ser. Una y otra vez el rey se pensaba que seria de su vida sin ella, día tras día pensaba y pensaba, lloraba y se angustiaba hacia de todo para salir de esa depresión, pero seguía igual o peor, fue un día que hablando con su mago, llego a una conclusión, -¡RENUNCIO!- Empezó a gritar, el mago lo miro con ojos desorbitados, - ¿Que dice mi rey, como va a renunciar?- le dijo este al rey. –Si renuncio, renuncio a este castillo, a las tareas como rey, renuncio seguir buscándola, ya hice todo para encontrarla y si ella no quiere ser encontrada, no va a ser encontrada.-. El mago se sentó, tomo un poco de su tabaco, preparo la pipa y antes de prenderla pregunto. -¿Mi señor, como llego usted a esa conclusión?-. El rey se acercó, extendió su mano y saco una cerilla, la prendió y con este prendió la pipa del mago, lo cual sorprendió al mago. – No me mires así viejo amigo, ya no soy tu rey, ni tu mi mago, llegue a esa conclusión porque ella se fue y sin decirme adiós y se que la lastime de apoco como ella me lastimo a mi, pero sabes que mi amigo, es algo que me lo voy a lamentar toda la vida, usted es el nuevo rey, usted es sabio, tiene mas experiencia que yo. Ella me dijo me voy, quizás nunca mas me encuentres o bien mañana te tenga a mis pies o yo a los tuyos, fuero sus ultimas palabras, pero yo estaba muy dormido para hacer algo al respecto- Dijo el hombre entre soslayos y angustia, pero antes de quebrarse por completo dijo -Ahora parto en un viaje oscuro, deséame suerte…

viernes, 13 de noviembre de 2009

Adiós..


Amaneció y frene el trote de mi caballo, gire para ver todo lo que dejaba atrás, un paisaje hermoso, flores, mariposas, el rio al despertar de la mañana junto con todos los animales que se refrescaban al comenzar el día. Frente a mi solo se veían plantas con pinches, arboles secos, un paisaje fúnebre. Bien! Me dije hacia mis adentros, no se que me espera, pero es el único camino que hay. Me habían despojado de todo y me habían obligado a irme. Acá estoy, lo pensé durante un largo tiempo y al no ver otra opción me adentre en el bosque… Y volví a pensar para mis adentros – No es el momento, pero espero volver a ver ese paisaje alguna otra vez en mi vida, hoy ya es tarde para volver, no soy bienvenido…Adiós..

martes, 10 de noviembre de 2009

Nunca estamos solos


Grandes Dragones se enfrentan a un solo hombre, este mira al norte sin saber que detrás suyo existe una horda de guerreros que darían su vida por el. De repente el dragón mas grande despliega sus alas y cae en picada hacia el. En ese momento descubre que no estaba solo y que ahí estaban sus amigos para ayudarle a vencer a las bestias.

lunes, 9 de noviembre de 2009

Y de repente... Se esfumo


Hace un tiempo atrás un caballero, teniendo todas las ganas de luchar contra dragones, se enfrente a uno de los mas grandes. En su lucha tubo miedo, se vio abatido varias veces, pero a el sin importarle seguía, estocada tras estocada, luchando contra la bestia. Un día se acerco un caballero, el cual lucia una armadura completamente recubierta de oro y pequeñas incrustaciones de gemas. El recién llegado se unió a nuestro hombre para luchar contra la bestia, sin decir una palabra. Por momentos el nuevo caballero parecía dudar de si seguir luchando junto a nuestro caballero, que no paraba un segundo en atacar y defenderse del dragón.
Un día, antes de una de las batallas, nuestro hombre, decidió hablar con el amable caballero que había decidido unirse a él para la lucha. –¿Porque me ayudas?- Pregunto. --Tengo mis propias razones-, contesto una voz impuesta desde el fondo de la armadura dorada. -¿Podrías sacarte el casco de la armadura para poder verlo mi amigo?-, decidido, le dijo nuestro caballero. Se hicieron unos minutos de silencio cortante. Y el casco dorado se desprendió de la armadura, unos cabellos negros como la noche sin luna, se desparramaron por la armadura y unos ojos marrones como el café, se posaron sobre el caballero… -¿Tú?- Asombrado, el caballero dejo caer su taza del esayuno, y le comenzaron a temblar las piernas. Tenia al amor de su vida frente a sus ojos, esa mujer por la cual el luchaba contra tantos dragones.- Si, al verte luchar contra los dragones aprendí mucho y me decidí a luchar junto a ti. Jamás pensé que seria tan difícil y muchas veces dude de seguir luchando, pero hoy estoy decidida a luchar junto a ti mi vida, juntos se que podemos luchar contra lo que separados jamás lograremos vencer- Dijo la mujer corriendo y abrazando fuertemente al caballero. – Pero tu sabes bien contra que lucho, son dragones de gran porte que surgieron del pasado y que están decididos a acabar con nuestro presente- Rezongó el caballero entre angustia, asombro y una necesidad de mostrarse fuerte.- Son mis dragones, surgieron de mi pasado y creo que si das la vida para luchar contra ellos, mereces que luchemos juntos- La mujer al ver la cara de su amado contesto.
Se hizo el momento en que el cielo se torno de un tono violacio y el aire se hizo cortante como el filo de una espada recién terminada. La hora había llegado, uno de los dragones se pozo sobre una ladera, donde podía ver a sus dos victimas, otro se quedo un poco mas lejos un poco cansado por las luchas anteriores, pero el fuego de la batalla aun ardía en su interior. Fue el momento en que el primer dragón voló sobre ellos y ataco directamente el corazón del caballero, había dado un golpe certero y mortal. La mujer al ver esto desesperada lucho contra el dragón, nadie sabe como y porque el caballero moribundo logro ponerse de pie y darle una estocada al dragón antes de que atacara a la hermosa mujer. El dragón chillo y se retiro, pero dejando una herida mortal al hombre y varias quemaduras, por el acido de su saliva, a la mujer. El aire cambio y una suave brisa corrió por el campo de batalla, lejos se veía al dragón moribundo irse y el acechante dragón todavía posado en la ladera. La pareja se unió en un fuerte abrazo y el hombre se puso de pie, la mujer lo ayudo a despojarse de su armadura y decididos a terminar con los dragones salieron corriendo para enfrentarse a la otra bestia. Duros momentos pasaron en las siguientes luchas, muchas veces la mujer dudo de salir corriendo pero el hombre estaba ahí para darle respiro a ella y seguir juntos en la lucha.
Las peleas duraron varios días y los dragones iban variando, un poco más grandes algunos y otros más chicos pero ninguno se comparaba al porte de los dos dragones que habían huido el primer día.
Un día ventoso y con mucho animo de soledad, se encontraron frente a frente al dragón, que alguna vez había sido herido por el caballero y el cual había lastimado a este con una herida mortal. El dragón comenzó a reír y a reír, los dos humanos se miraron asombrados y se largaron a atacarlo, el dragón sin pensarlo volvió a cometer el mismo acto, hirió de gravedad al caballero pero esta vez a la mujer le clavo la mirada y pronuncio unas palabras – ¿Hasta donde estas dispuesta a llegar por amor?- La mujer asombrada contesto –Mas lejos de lo que tu piensas- y se echo a correr contra el dragón. Este volvió a hablar haciendo que la mujer frenara su marcha.- ¿Estas segura de eso? Te vi muchas veces dudar de eso y mostrarte insegura, también lo vi a el, pero jamás dudo en luchar para ganarnos y así lograr que ustedes sean felices y disfrutar del futuro sin pensar en el pasado- La mujer bajo la cabeza, soslayo y dijo en vos baja- Yo a el lo amo pero últimamente ya no siento que me ame, esta siempre luchando y viendo de mejorar cosas, pero nos hemos olvidado del amor que algún día nos tuvimos- El hombre intento recomponerse y dijo, se que una vez te abandone, pero no me abandones, podemos mejorar, estos dragones con el tiempo morirán si no dejamos de alimentarlos, verdaderamente Te Amo y te lo demuestra haber llegado hasta acá- La mujer hizo un silencio y de repente el campo de batalle se helo, los dragones desaparecieron y se escucho un estruendo. La armadura dorada cayó al piso dejando caer y desparramando arena. El hombre estaba solo, los dragones y la mujer habían desaparecido. En algún momento la mujer decidió abandonarlo y dejar todo atrás, llevándose consigo sus dragones y algo mas,….El corazón del caballero.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

El comienzo de Los Señores de las Historias



Este blog fue creado para darle lugar a las creaciones de dos mentes. Quizás por momentos creamos que están bajo efectos de algún químico, pero solo son años de lectura de grandes autores como J.J.R. Tolkien. Esperamos de corazón que lo que publiquemos sea de su agrado y poder compartir con ustedes, nuestros amigos, toda nuestra imaginación y vuelo, historias, cuentos o simplemente fragmentos de nuestros pensamientos. Queremos apuntar a la realidad vista desde otro mundo, cosas como Grandes Luchas con Dragones podrían ser tomadas en la realidad el enfrentamiento con nuestro súper yo o con problemas del día a día . En si, intentaremos que disfruten de esto tanto como nosotros disfrutamos al crearlo.
Un Fuerte Abrazo.
Sir Caku